domingo, 8 de marzo de 2009

La legitimación criminal, labor en equipo

Desde una perspectiva "liberal" podríamos rasgarnos las vestiduras por el nuevo Proyecto de Ley socialista de genocidio y sustraernos a la realidad de los últimos 24 años pero yo, simplemente, prefiero no olvidar la realidad. Son demasiados muertos.


Los socialistas abrieron la espita del aborto inducido en contra del sentir general y promulgaron la ley 5 de Julio de 1985 de despenalización del aborto. No fue una medida populista sino que arriesgaron su rédito electoral y pusieron en marcha la maquinaria de propaganda gramsciana, porque la Cultura de la Muerte informaba sus objetivos por encima del sugerente calor de las poltronas.


Sin embargo, las motivaciones del Partido Popular en esta materia, han sido distintas si analizamos los hechos: el PP se opuso inicialmente a la Ley inicua pero fueron calculando el desgaste electoral que tendría su derogación y no actuaron cuando tuvieron ocasión. Para rematar la faena, hoy el PP ya está explícitamente satisfecho con 112.138 abortos/año amparados por la ley. De toda esa orgía de sangre, un 97% son por un supuesto riesgo para la salud física o psíquica de la madre, lo que representa un claro indicio de que la ley actual es una tapadera del aborto libre. Se pueden consultar todos los datos oficiales en las últimas cifras del Ministerio de Sanidad (los últimos datos son de 2007).


O sea, que el PP (el de hoy y el PP de Aznar que no modificó la ley en sus 8 años de gobierno), ha tomado la vida de 112.138 inocentes como un precio aceptable si de esos crímenes se deriva un rédito electoral que les permita instalar de nuevo sus posaderas en la poltrona gubernativa. Y de estas máximas de conducta, podemos esperar mucho más... porque está claro que el poder para el PP es un fin codiciado y no un instrumento al servicio del Bien Común.


Sin embargo, este genocidio no es el resultado exclusivo de la acción de los partidos, ya que estos obtienen necesariamente su respaldo en las elecciones. Por eso, todos aquellos electores que no han optado a lo largo de estos 24 años por una alternativa en favor de la vida y han apoyado la política de los unos o de los otros (formalmente maniquea y materialmente convergente en el tiempo), todos los electores que no han infligido un severo voto de castigo a PP y PSOE, han sido la pieza clave en este cementerio social: son los electores quienes han puesto a punto el motor de las trituradoras en España.


Siento la rudeza del mensaje, pero nunca se me ha dado el estilo florentino.

4 comentarios:

Manuel dijo...

Apuntar que el nº de abortos, responsabilidad del PP en el poder central, desde el 6 de Mayo de 1996 (Primer día de gobierno) hasta el 17 de Abril de 2004 (Toma de posesión de Rodríguez), ocho años, los niños asesinados por aborto fueron 511.429.
Y que son cientos de miles más los abortos responsabildad del PP en el gobierno de comunidades autónomas con transferencias en Educación, Sanidad e inspección (solamente en Madrid alrededor de 150.000) Eso sin contar los centenares de abortos por pildora

Jesús T.A. dijo...

Sí, Manolo pero los votantes del PP pueden hacer la vista gorda a la masacre de medio millón de criaturas, mientras arguyen mil pegas vanales a cualquier alternativa que reste votos a los promotores del crimen.

Conrad López dijo...

Recuerdo que, allá por 1983, participé en una manifestación contra el aborto convocada por Fuerza Nueva.

Al disolverse la manifestación, ya de vuelta a casa, pasamos frente a una iglesia de la que salían los fieles de Misa. Uno de ellos, incomprensiblemente furioso, arremetió (verbalmente) contra nosotros y tras vomitarnos la retahila de apítetos al uso (fascistas y demás) nos espetó algunas advertencias acerca del derecho de los demás a hacer lo que quisieran con sus cuerpos y lindezas de ese estilo.

Lógicamente nos dejó boquiabiertos e incapacitados para la respuesta.

Sintomático ¿no? Y aún no se había aprobado la ley asesina...

Jesús T.A. dijo...

Séneka, yo haría una reserva para ejecutar algún aborto con carácter retroactivo: vista la catadura moral de la "criatura" invocar el derecho de la madre a los 30 ó 50 años, para hacer con esa parte autónoma "de su cuerpo" lo que fuera más conveniente para la sociedad ;-)